Ayer realizamos el descenso del leitzaran después de las inundaciones del fin de semana. Nos encontramos unas condiciones ideales, con un caudal para disfrutar y el sol que animaba a meterse al agua.
A lo largo del descenso se puede observar la fuerza que tuvo que traer el río el domingo con un caudal que se aproximaba a los 240 m3/seg. Troncos empotrados en los puentes, barandillas destrozadas y material arrastrado depositado a gran altura en las orillas daban muestra de ello. Por tanto, atención a los troncos cruzados y recomendable mirar bien los pasos.